Nuestra primera parada en esta etapa enoturística será en BRIONES donde tendremos el primer contacto con los viñedos riojanos. Esta localidad, emplazada sobre un cerro cuya ladera norte está cortada por el río Ebro, posee una interesante trama urbana medieval donde la mayoría de sus edificaciones están levantadas en piedra de sillería. Seguimos nuestra ruta enológica visitando HARO, capital del vino de La Rioja. Tan importantes son sus bodegas de renombre internacional como su legado artístico y arquitectónico: Ayuntamiento, Iglesia de Santo Tomás, numerosos palacios y calles ancestrales. Visitaremos una de sus famosas bodegas para descubrir los procesos de elaboración y, cómo no, degustar sus vinos (entrada incluida). Tendremos tiempo para almorzar en esta ciudad repleta de tabernas y restaurantes. Siguiente parada: LAGUARDIA, bella e inigualable, situada en lo alto de un cerro rodeado de viñedos, con su muralla y sus calles empedradas que derraman acontecimientos históricos entre los reinos de Navarra y Castilla. Famosa por sus vinos. Tiempo para pasear y acompañados de nuestro guía llegaremos hasta las Bodegas Ysios, diseñadas por Santiago Calatrava (entrada no incluida). Antes de regresar a Logroño haremos otro alto en el camino para conocer ELCIEGO donde sus casas palacio de arquitectura tradicional contrastan con el espectacular hotel diseñado por el arquitecto Frank Ghery para las bodegas Marqués de Riscal. Regresamos a LOGROÑO donde tendremos tiempo para pasear por sus enclaves más significativos: el Paseo de El Espolón, la concatedral de Santa María de La Redonda, el convento de la Merced. Y por supuesto, disfrutaremos de sus tapas recorriendo su famosa “Calle Laurel”. Alojamiento.